Se acabó la pesadilla de andar trapeando o limpiando por derramar líquidos cuando intentas verterlos de una taza a otra taza. Te tenemos una solución para la que necesitas sólo una cosa que ya tienes en casa.

Paso 1

Busca una cucharita de las que usamos para el postre. 

Paso 2

Coloca la cucharita de forma horizontal y boca abajo en el medio de la taza que tiene el líquido que quieres verter a otra taza. Cerciórate que la asa de la taza quede perpendicular al mango de la cucharita. Y la parte de abajo debe sobresalir como se muestra en la imagen. 

Paso 3

Ahora sosteniendo el mango de la cucharita y ejerciendo un poco de presión procede a verter el líquido. La cucharita funciona a manera de pico y no derramarás ni una sola gota. ¡De nada! ¿Dudas? Mira nuestro video al final de este artículo. 👀