Maribel Guardia ha decidido que regresará al trabajo. En una nueva muestra de la entereza y disciplina que ha mostrado durante toda su vida, pero aun más en los días posteriores a la muerte de su hijo Julián Figueroa, la estrella costarricense ha decidió cumplir con sus compromisos profesionales.

La decisión fue anunciada en las redes sociales por los empresarios de la obra “Lagunilla mi barrio”, en la que Guardia actúa y en la que justamente estaba trabajando cuando Julián murió de un infarto en su casa. 

Maribel Guardia Julian Figueroa
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“A través de este comunicado se le informa a los medios de comunicación y público general que la señora Maribel Guardia ha confirmado su participación en la obra de teatro ‘Lagunilla mi barrio’, en las funciones programadas para el 19 de abril en Mexicali, y 20 de abril en Tijuana”, indicó un comunicado compartido en redes sociales.

“Agradeciendo de antemano todas las muestras de apoyo que se le ha brindado por la terrible situación por la que está pasando”, agregó el mensaje.

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Escrita por Adolfo Torres Portillo, “Lagunilla mi barrio” cuenta la historia de un hombre que se ve obligado a regresar al área pobre donde creció en la Ciudad de México. Allí pasa de la desesperación al agradecimiento, al forjar estrechos lazos con sus vecinos y hasta encuentra el amor. 

Aunque la situación es diferente, no cabe duda que Guardia recibirá el cariño de sus compañeros y el público. Para muchos artistas, estar sobre el escenario es la mejor terapia del mundo. El elenco también incluye a Albertano, Violeta Isfel, Laura León “La Tesorito” y Los Mascabrothers Freddy y Germán Ortega.

La artista despidió a su único hijo el domingo. Los restos de Julián Figueroa fueron cremados de inmediato y la familia realizó un funeral íntimo e informal en su casa. El martes, Maribel Guardia dio sus primeras declaraciones a la prensa tras su gran pérdida, en medio de un profundo dolor.

“Era mi amor, el niño de mis ojos. Ha sido muy duro perderlo pero Dios me lo dio, Dios me lo quitó. Lo dejo en sus manos. Tenía tanto que recorrer Julián, estaba empezando su carrera, tenía 500 composiciones, montaba a caballo, tocaba el piano, tocaba la guitarra. Pero así fue, gracias a Dios me dejó a esta niña tan linda [su nieta Imelda], mi nuera que la adoro y un bebé precioso que tenemos que sacarlo adelante, y que ayer Imelda le dijo que su papá había muerto y que era un ángel pero todavía no lo entiende, obviamente”, expresó.

Aunque ya se había mencionado a Ninel Conde como su posible suplente, la decisión de regresar a la obra es más que coherente con la forma en la que la artista se ha comportado a lo largo de su vida y en los últimos días. Anclada en su profunda fe y con el apoyo de sus seres queridos y el público, Maribel sigue adelante.